NÚÑEZ, EL DISCURSO DEL PACTO; DEFINICIONES PARA UN CAMBIO
Escala Crítica/Columna diaria
*La palabra de los políticos, desgaste y elogio desmedido
*Tomarlos en serio: comprometerlos y comprometerse
*Cuando Ratzinger dijo “ya no”; la interpretación de Villoro
Víctor M. Sámano Labastida
EL DISCURSO de los políticos tiene entre las mayorías dos destinos: se sobrevalora y todo lo que salga de la boca de quien ejerce el poder es elogiado de manera acrítica, o simplemente se desecha como palabrería, sin merecer la mínima reflexión. Un desgaste en el ejercicio de la autoridad encuentra a la población incrédula o indiferente. Después de la experiencia reciente, cuando un gobernante (Andrés Granier) pasó de la apabullante popularidad al rechazo, dotar de sentido al mensaje desde el poder no resulta fácil. Aún cuando el emisor (Arturo Núñez) haya llegado con la legitimidad obtenida en las urnas.