Escala Crítica/Columna diaria
*Pozos de exploración en Zapata, Balancán y Tenosique
*Demarcaciones de Los Ríos, agropecuarias por excelencia
*Habrá una policía de la Marina; operará en Tabasco
Víctor M. Sámano Labastida
AQUELLOS tiempos en los que la actividad petrolera en Tabasco se reducía a dos o tres municipios –Comalcalco y Macuspana, particularmente- quedaron atrás. De cubrir la tercera parte del territorio, ahora la explotación de hidrocarburos abarca todo el estado. Incluida la zona de producción agrícola ganadera de Los Ríos: Jonuta, Balancán, Tenosique y Zapata.
Tabasco se convierte así en único estado de los nueve donde hay actividad de Pemex donde la explotación petrolera se extiende por toda su superficie e involucra de una u otra manera a toda la población. Si hasta antes del llamado “tercer auge” petrolero se reportaba la existencia de instalaciones petroleras en unas 900 comunidades, resulta lógico que habrá más poblados involucrados directamente. Se pasa de los 13 a los 17 municipios.
En los proyectos de exploración de Pemex destaca el campo Pakal, con 59 pozos. Un yacimiento que se extiende por unos 28 kilómetros.
Es relevante porque con este proyecto de extracción la actividad petrolera incorpora de manera definitiva a los municipios de Jonuta, Tenosique, Emiliano Zapata y Balancán. Un yacimiento que abarca Macuspana, Centla, Centro, Jalapa, y Tacotalpa.
La experiencia de los inicios de la explotación petrolera en la entidad, documentada por especialistas en economía y finanzas, muestran cómo si bien esta industria permitió en un principio elevar los ingresos de un núcleo de población –Comalcalco y Macuspana-, posteriormente se provocó la ampliación de la brecha de la desigualdad. Es una circunstancia que no debe repetirse.
Habrá oportunidad de ampliar nuestra reflexión sobre el tema.
OTRA CORPORACIÓN
LAS CUESTIONES de seguridad son, como lo hemos comprobado, de primera importancia para Tabasco. También para la República. El lunes se publicó en el Diario Oficial el acuerdo para integrar la llamada policía marítima para vigilar los 19 puertos del país.
Entre los puertos que vigilará la nueva policía marina se cuentan Dos Bocas, en Tabasco, así como Coatzacoalcos y Tuxpan, Veracruz, el propio puerto de Veracruz, y Ciudad del Carmen, Campeche, lo mismo que Progreso, Yucatán, en el sureste.
También tendrán instalaciones en Ensenada y La Paz, Baja California; Guaymas, Sonora; Mazatlán, Sinaloa; Puerto Vallarta, Jalisco; Manzanillo, Colima; Lázaro Cárdenas, Michoacán; Acapulco, Guerrero; Salina Cruz, Oaxaca; Puerto Chiapas; Puerto Matamoros, Altamira y Tampico, Tamaulipas.
El nombre de este nuevo esquema de vigilancia será Unidades Navales de Protección Portuaria. Aunque desde el 2007 se crearon unidades especiales para la vigilancia de puertos y vías generales de comunicación por agua, será hasta cuando se formalicen.
Como parte de la reestructuración de los cuerpos de vigilancia y seguridad, en julio próximo también comenzarán a operar los efectivos de la gendarmería nacional.
Al igual que la policía marítima, Tabasco está considerado un sitio estratégico para las operaciones de la gendarmería. Sobre todo en la vigilancia de la zona fronteriza.
Asimismo, en la entidad serán establecidas unidades especiales contra los secuestros.
En varias entidades del país, como en Chiapas estado vecino, está autorizada también la acción de las denominadas guardias rurales, entrenadas y armadas por el ejército.
Quizá estemos en la circunstancia en la que se impulse la ciudadanización de la seguridad con esquemas ya probados no sólo en México sino en varios países.
MINISTROS QUE ADMINISTRAN
SE HIZO costumbre que los ministros de la corte no entren al fondo de los asuntos que se le plantean. Bordan lo formal y ahí se quedan.
Esto ocurre ahora con la petición para que se pronunciaran en torno a la consulta popular por la reforma energética.
El pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) desechó la consulta a trámite del Partido de la Revolución Democrática (PRD). Esta organización quería que los ministros calificaran la constitucionalidad de la consulta popular.
Dijeron que sí, pero no. O no, pero sí. Resolvieron que el tema debe ser resuelto por el Senado.
Según el ministro Fernando Franco si se cumple el “requisito de procedencia” con firmas de los solicitantes de la consulta que sean al menos 2 por ciento de la lista nominal de electores, “el Congreso no tendría facultades para impedir el desarrollo de una consulta”.
Sólo que será el Congreso el que esté en la obligación de emitir la convocatoria y solicitar a la Corte que califique “la constitucionalidad de la materia de la consulta”.
Una eventual consulta popular en materia energética –ejercicio democrático cada vez más lejano- tendría que hacerse durante los comicios federales del 2015. Cuando también se vote por los diputados federales y, en casos como el de Tabasco, también por alcaldes y diputados locales.
Cuatro meses tardaron los ministros en resolver semejante cosa.
Quienes solicitan la consulta presentaron un millón 672 mil firmas. Ahora las autoridades electorales tienen que esas rúbricas corresponden al 2 por ciento del padrón que exige la Constitución.
AL MARGEN
TÓMELO con las reservas del caso pero hay indicios de que el conflicto con un sector de la policía puede entrar en otra etapa. Un grupo promueve la creación de un “sindicato de policías”.
LOS CENTROS integradores fueron una experiencia importante y memorable para Tabasco. Este tipo de organización fue establecida durante el gobierno de Enrique González Pedrero. El modelo proviene de las “ciudades hospitales” (hospitalarias) de Vasco de Quiroga. Este viernes, a las 19:00 horas será presentado el libro “Los centros integradores en Tabasco. Una experiencia de integración territorial”, obra de Baldemar Hernández Márquez. En Instituto Juárez de Villahermosa. (vmsamano@yahoo.com.mx)
