Constitución y desarticulación del Estado; en cien años 700 reformas y otros remedios

 Escala Crítica/Columna diaria

*Los mexicanos no sólo desconocen la Carta Magna, desconfían
*Nuestra Ley Fundamental, la más cambiada y la más longeva 
*Tesis antipolítica, la que insiste en parálisis legislativa: Núñez
 
Víctor M. Sámano Labastida
EN SU ORIGEN etimológico el término “constitución” viene del latín constitutio, constitutionis, derivado de constituere (establecer, organizar, colocar, construir, integrar) y del verbo statuere (situar, disponer, erigir, colocar). Los estudiosos nos remiten a la raíz indoeuropea stare, que significa  “estar en pie”. En la antigua Roma, constitutio refería a las leyes y reglamentos integrales; posteriormente definió a la compilación de normas sobre los derechos y deberes de los ciudadanos de una organización, y sobre todo de un país o Estado.