Prevención del delito y la violencia: recuperar calles e instituciones

 Escala Crítica/Columna diaria

*Poner bardas y barrotes no garantiza la seguridad
*Riesgo, dejar que delincuentes ocupen el espacio público
*“El crimen no paga”, decían los clásicos; contra impunidad
 
Víctor M. Sámano Labastida
 
LAS CIUDADES más seguras según la percepción de sus habitantes, nos dicen los registros más recientes del INEGI, son Mérida (Yucatán), Puerto Vallarta (Jalisco), Saltillo y Piedras Negras (Coahuila) y las capitales de Campeche y Durango. No siempre ha sido así. Como también comenzó a variar –muy poco, pero existe un avance- en el caso de Villahermosa, que ahora se coloca en cuarto y no en primer sitio de riesgo, cuestión a la que me referí en mi anterior colaboración.