Escala Crítica/ Ventanasur, Diario Presente, Horay20Noticias, Avance
* Gobernar, ¿con o contra AMLO? Hipótesis de nogal o hermandad.
* Proyecto de izquierda social: poder, unidad en movimiento y pueblo.
* Sobre reconciliación en México: simulación vs polarización, con ideas.
Víctor M. Sámano Labastida
Septiembre 30 de 2024.- LA TRANSICIÓN del poder federal es imán de miradas ciudadanas y genera reflexiones con incertidumbre. “Experimental”, fue el adjetivo que usó la analista Vanessa Romero, cuando Carmen Aristegui le preguntó por una palabra para describir el tiempo que vivimos (CNN, 17/09/2024). Elección precisa, “tiempo experimental”, por sucesos inéditos que apuntan al cambio de régimen y elevan la tensión social, acentuando la polarización que existe alrededor del Poder Ejecutivo. Costo social mínimo frente al tamaño del cambio, si se conduce la agenda pública por cauces pacíficos.
Andrés Manuel López Obrador se despide, Claudia llega. Transición que define el funcionamiento del primer gobierno de izquierda social en México. Veamos viñetas del final que es principio y continuidad del proyecto de gobierno más votado (36 millones) en la historia del país.
NOGAL O HERMANDAD
El árbol de Nogal tiene una propiedad singular: nada crece bajo su sombra. Opositores utilizan el nogal como metáfora: insisten en que AMLO no soltará el poder. Jesús Silva Herzog-Márquez y Leo Zuckerman son analistas del nogal con dato ‘duro’ (La hora de opinar, 23/09/2024): la llegada de Andrés Manuel López Beltrán -hijo de AMLO- a la Secretaría de Organización de Morena “es cuña para Claudia”. Esto lo desechó Javier Tello: “podría darse una colaboración política indispensable, por la afinidad ideológica y social entre AMLO y Claudia”. Dos miradas para el mismo dato.
En la historia de México, el Nogal es Maximato. Carlos Bravo Regidor (24/09/2024, El Heraldo de México) advirtió errores en la hipótesis del Maximato 2024-2030, pues existe “una premisa altamente problemática: que Sheinbaum sabría, querría o podría gobernar si López Obrador no le estorbara. Dicho de otro modo, la hipótesis representa a Andrés Manuel como un obstáculo para que Claudia gobierne cuando quizá la realidad sea al revés: que, lejos de estorbarle, Claudia necesite a López Obrador para poder gobernar”. Esto suena estratégico y realista.
El “claudismo” –señala- “se ha definido muy deliberada y explícitamente como una promesa de continuidad, no de diferencia ni de autonomía respecto a López Obrador”. Esto ya suena tajante y no aparece el movimiento social que impulsa a la 4T. Bravo Regidor va más allá y plantea que Claudia “tampoco tiene un grupo político propio que sea amplio o fuerte, una coalición verdaderamente suya, una base social que —en caso de desacuerdo o enfrentamiento— le vaya a ser más leal a ella que a él”. ¿Subestima el poder presidencial a ejercer, y la disciplina estratégica que mostró Claudia para llegar?
Más allá de apreciaciones fallidas, la realidad es legible: la Presidenta Electa Claudia Sheinbaum (23/09/2024), con AMLO presente, habló en la inauguración de la cuarta sección del Bosque de Chapultepec (espacio ecológico/cultural): “Y el día de hoy, con todos ustedes que nos conocemos desde hace cuánto y nos hemos visto tantas veces en esta lucha, lo que puedo decir es que somos una hermandad que se construye y se ha construido a lo largo de estos años de lucha y que se va a seguir construyendo con el segundo piso de la cuarta transformación”. AMLO, en el mismo evento: “hemos construido una gran hermandad”.
¿Nogal o Hermandad?
OPOSICIÓN, RESPETO Y ¿RECONCILIACIÓN?
¿Y LA OPOSICIÓN? Aturdida. Escribe Gabriel Guerra: “en el caso del PRI, la figura de Alejandro Moreno provoca rechazo y éxodo de la poca militancia que permanece. En el PAN, la falta de autocrítica es tal que el presidente saliente busca dejar a su delfín, como corolario a una de las peores gestiones de que ese partido tenga memoria. Y en Movimiento Ciudadano, el aparente triunfador opositor de la elección pasada, las desavenencias entre el bloque Jalisco y el de Nuevo León amenazan con provocar una escisión a la que difícilmente sobrevivirían”. Oposición sin brillo.
¿Hay espacio para el crecimiento opositor? La oposición multiplica membretes y causas, dice Guerra, pero no logra conectar con la ciudadanía. Se negaron a comprender el fenómeno AMLO. Guerra es directo: “La negación de la realidad no es una buena plataforma electoral”.
¿Y la reconciliación? Guerra es positivo, aunque olvida que antes de la polarización existió simulación: “A los ciudadanos sin partido pero con interés por la cosa pública, a quienes nos gustaría ver menos concentración del poder y mejores alternativas electorales, nos queda primero que nada el diálogo abierto y respetuoso”. Moción atendible, aunque se necesita confrontación de ideas y de proyectos: “La confrontación no nos ha llevado a nada bueno, y no lo hará: es hora de dejar atrás los pleitos infantiles y salir del patio del jardín de niños en que se ha convertido la política mexicana”. La imagen de política infantilizada es sugerente, aunque se olvida (de nuevo) lo positivo de confrontar ideas de forma pacífica. (Con la colaboración de PDV)
(vmsamano@hotmail.com)