Modelo neoliberal de gobierno y futuro: estas ruinas que ves; fintas y T-MEC a prueba

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* Trump: definiciones, amagos y amenazas; imperio y modelo  

* El neoliberalismo: derrotado en las urnas y en los bolsillos     

* ¿Fin o continuidad de la economía sin rostro humano?

Víctor M. Sámano Labastida

MARZO 19 DE 2025.-LO QUE SUCEDE en alguna parte del mundo afecta, tarde o temprano, a los lugares aparentemente lejanos. El resultado de la globalización. Como nos ha ilustrado Firdaus Jhabvala M. en la serie de textos que se publican en PRESENTE, para entender los tiempos actuales importa el contexto histórico y la complejidad de las relaciones entre política, economía y sociedad. Se viven tiempos de cambio geopolítico con la irrupción de un Donald Trump ‘recargado’ en Estados Unidos y que ahora le tica lidiar a Claudia Sheinbaum, primera presidenta mujer que enfrenta los embates externos e internos.

¿El reajuste empujado por Trump traerá consigo nuevas reglas del comercio internacional? Hasta ahora, amenaza con aranceles a países/socios comerciales, aunque no concreta del todo la acción. Lo decisivo quizás será cómo se reconfiguran las cadenas de suministros para la manufactura de productos en diversos países, al igual que la pretendida reubicación territorial de fábricas. En ese panorama, otra pregunta pertinente es: ¿qué sucedió con el modelo neoliberal capitalista que ganó la Guerra Fría?

Trump, con afanes proteccionistas que anuncia sin aplicar, descree del modelo neoliberal y trata de afianzar su poder al imponer agenda geopolítica en lo militar, lo económico y lo cultural. ¿Cómo lo hace? Desde el plano mediático irradia mensajes agresivos, sin reparar en contradicciones y la merma de su credibilidad. Otra pregunta: ¿qué queda del modelo de gobierno neoliberal?

Es simbólico que el gobierno francés, luego de amenazas de Trump para la Unión Europea, pidiera al gobierno de Estados Unidos devolver la Estatua de la Libertad (regalo de Francia, en el siglo XIX).                  

Otro hecho significativo es la polémica entre el Presidente de la Corte Suprema, John Roberts, y Trump, cuando éste exigió juicio político (impeachment) y destitución de un juez federal de Washington, James Boasberg. El juez detuvo un vuelo de 200 deportados venezolanos que iban a ser enviados a El Salvador. Esto enfureció a Trump que, por cierto, disminuye su popularidad en encuestas: apenas 49% de aprobación.       

SEÑAS DE IDENTIDAD

El neoliberalismo fue capitalismo triunfante después de la caída del Muro de Berlín en 1989. Señas de identidad: libre mercado, democracia formal, consumo acelerado de productos, multiplicación de imágenes y tecnología como estandartes de libertad individual.

Con el final de la Guerra Fría y del llamado socialismo real, muchos países recibieron parámetros políticos de Washington, instrucciones económicas del Fondo Monetario internacional (FMI) y dictados financieros del Banco Mundial. Han pasado 36 años. Estamos en la resaca neoliberal y Trump anuncia vuelco geopolítico. Una pregunta permanece: ¿cómo generar riqueza y bienestar en un marco democrático?     

El neoliberalismo en México todavía provoca discusiones públicas. ‘Neoliberal’ fue adjetivo estratégico de AMLO para referirse a un pasado gris que abarca 6 sexenios (1982-2018), con salario mínimo estancado, privatizaciones de bienes públicos y crisis cíclicas. ¿Cómo definir el neoliberalismo MX? En sentido general, es un modelo económico que requiere poder político para favorecer la actividad privada en áreas estratégicas. El neoliberalismo en América Latina, bajo la tutela geopolítica de EEUU, tuvo en principio alumnos aplicados en Chile y México. Las bases del tinglado neoliberal se sentaron antes de 1989, tanto en Chile -que trató de enderezar la dictadura pinochetista- como en México -que ejecutó en 1982 la rotación de élites en el PRI, partido hegemónico-. Luego de periodos financieros turbulentos, Chile y México recibieron consigna: disciplina macroeconómica. Esa consigna desdibujó la dimensión social del gobierno. Cuidar lo macro y favorecer lo privado no trajo mejores condiciones de vida.                  

Varios analistas no se ponen de acuerdo en el camino que seguirá Donald Trump. Entre el proteccionismo anunciado y el afán de multiplicar ganancias, existe contradicción. Además, no se definen cuáles serán los beneficios para el grueso de la población. ¿Habrá ajuste económico que redunde en mejores condiciones de vida para la clase obrera? Trump en su retórica dice que sí; en los hechos, ‘dice’ no. 

¿LECCIONES APRENDIDAS?

EL NEOLIBERALISMO EN MÉXICO fue vencido en las urnas por limitaciones del crecimiento económico 1987-2017: 1) crecimiento promedio de 1.3% del Producto Interno Bruto anual, lejos del 5% necesario para la creación suficiente de empleos y la distribución de bienes y servicios; 2) pérdida de 600% del poder adquisitivo del salario mínimo nacional, golpe a 15 millones de familias (45 millones de personas por lo menos) y ni hablar de trabajadores que no reciben el mínimo; 3) devaluación del peso en 160% del valor nominal de 1987, incluyendo tres ceros quitados a la moneda en 1991.

Desastre social por colapso económico. Así recibió el país en 2018, AMLO.

La macroeconomía de pizarrón, querencia neoliberal, no rescató la economía de las personas. La macroeconomía es útil por el crecimiento poblacional, pero sus indicadores de bienestar no llegan al bolsillo de los de abajo. La macroeconomía, como eje de las finanzas nacionales y as en la manga de corporaciones transnacionales, no desaparecerá. La 4T –vía nuevo Secretario de Hacienda- cuida números de deuda pública y nivel de inflación. Pero ahí no termina la gestión gubernamental.     

México vive todavía la resaca neoliberal. Rumbo al 2026, revisión del T-MEC con Trump en modo arancel, es razonable un debate sobre modelos económicos, para no repetir desastres. Pobreza y desigualdad son enemigos de todos.

(vmsamano@hotmail.com)

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